Nació el 10 de junio de 1789, en el castillo de Trenquelléon, junto a Feugarolles (Lot-et-Garonne, Francia). Hija del barón Carlos de Batz y de su esposa Úrsula de Peyronnencq. En 1792 nace su hermano Carlos Policarpo y en 1799, su hermana Deseada.
Con el estallido de la Revolución francesa,
la familia parte al exilio rumbo a España y Portugal. En 1798, el barón se
reúne con su familia en Braganza.
El año 1801 marca el fin del destierro,
la familia pasa por San
Sebastián en
enero, donde Adela hace la primera comunión, y regresa a Francia
en noviembre. Adela manifiesta la llamada a la Vida Consagrada,
teniendo una primera intención de entrar en el Carmelo. Este proyecto no
se lleva a cabo.
En 1803 Adela recibe en Agen el sacramento de la confirmación de manos del monseñor Jacoupy, con Juana y Águeda Diché. Con Juana, cuatro años mayor que ella, entabla una amistad que durará toda la vida. Adela comienza a llevar una vida espiritual intensa, con un proyecto personal de vida y una fuerte actividad apostólica en la región, ayudada por amigas y algunos sacerdotes de la zona. El 5 de agosto de1804, animadas por el señor Ducorneau, fundan una Pequeña Asociación, de tipo espiritual y con intención evangelizadora. A partir de ese momento comienza además una intensa correspondencia epistolar con sus amigas (especialmente con Águeda Diché), que más tarde continuará, ya como religiosa. En 1807 el Padre Larribeau sucede a Ducourneau al frente de la "Pequeña Asociación", y se convierte también en el director espiritual de Adela. En ese momento la Asociación contaba ya con sesenta miembros.