BEATO ANTONIO ARRUE PEIRO
1936 d.C.
4 de agosto
Antonio nació en 1908
en Calatayud, con su padre compartió el trabajo de carpintero. En
poco tiempo pierde a sus padres y su única hermana. A los 23 años
en 1931 conoce al sacerdote Orionista el beato Ricardo Gil Barcelón
que lo acoge en su casa de Valencia y con el que colabora en la atención
a los más necesitados. Era un joven piadoso, serio, trabajador y de
pocas palabras que tras sus experiencia con el P. Ricardo entra como postulante
en la Pequeña Obra de la Divina Providencia nombre oficial de los
Orionistas.
Para España eran años llenos de desórdenes
sociales terribles y de persecución religiosa. Cuando en julio de
1936 comenzó la persecución religiosa, el Padre Gil fue respetado
hasta el final porque se ocupaba de los más pobres. Dos veces fueron
a su casa los milicianos para eliminarle como a tantos otros. Dos veces se
interpuso la gente del vecindario diciendo: "¡Es bueno, ayuda a los
pobres, nuestros hijos comen porque está Él!". La tercera vez,
el 3 de agosto, cerraron la discusión: "¡Es precisamente a los
buenos a los que buscamos nosotros!".
Un joven aspirante, Antonio Arrué Pairó, que no
estaba en casa, vio el camión en el que habían hecho subir
al Padre. No lo dudó un momento, corrió a su encuentro y quiso
a toda costa permanecer con Él. Al día siguiente fueron llevados
juntos al Saler de Valencia. Fusilaron al Padre Gil que a la propuesta blasfema
de gritar "¡viva la anarquía!" prefirió gritar "¡Viva
Cristo Rey!". Antonio - según el relato de un guardia - al ver caer
al Padre se arrojó a su lado para sostenerlo. Los guardias comunistas
le fracturaron el cráneo con la culata del fusil. Fueron beatificados
el 27 de octubre de 2013, durante el pontificado de S.S. Francisco.