Sí. Según la
Biblia son posibles las apariciones. De hecho la Biblia presenta apariciones
de ángeles, tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento.
Los ángeles que aparecen en la Biblia tienen la misión de ser
mensajeros de Dios para la humanidad. Ellos son los instrumentos que utiliza
para comunicar su plan a los hombres. Fue un ángel quien encontró
a Agar en el desierto (Génesis 16,7-11); unos ángeles sacaron
a Lot de Sodoma (Génesis 19); fue un ángel quien le anunció
a Gedeón que debía salvar a su pueblo (Jueces 6,11-22); un ángel
anunció el nacimiento de Sansón (Jueces 13,2-7), y el ángel
Gabriel instruyó a Daniel (Daniel 8,16).
El ángel Gabriel anunció el nacimiento de San Juan Bautista (Lucas 1,5-20) y la Encarnación del Redentor (Lucas 1, 26-38). Un ángel libró milagrosamente a Pedro de la cárcel (Hechos 12,6-11). También los Evangelios y Hechos de los Apóstoles nos narran las apariciones de Jesús Resucitado a sus discípulos (Juan 20,11-18; Hechos 9,3-6; 1 Corintios 15,3-5).
Un caso muy significativo lo constituye la aparición de Moisés y Elías, los más grandes personajes del Antiguo Testamento, puesto que se trata de seres humanos que vivieron y murieron cientos de años antes de Cristo. "Seis días después, Jesús tomó consigo a Pedro, a Santiago y a Juan y los llevó a ellos solos a un monte alto. A la vista de ellos su aspecto cambió completamente. Incluso sus ropas se volvieron resplandecientes, tan blancas como nadie en el mundo sería capaz de blanquearlas. Y se les aparecieron Elías y Moisés, que conversaban con Jesús (Marcos 9,2-4).
El ángel Gabriel anunció el nacimiento de San Juan Bautista (Lucas 1,5-20) y la Encarnación del Redentor (Lucas 1, 26-38). Un ángel libró milagrosamente a Pedro de la cárcel (Hechos 12,6-11). También los Evangelios y Hechos de los Apóstoles nos narran las apariciones de Jesús Resucitado a sus discípulos (Juan 20,11-18; Hechos 9,3-6; 1 Corintios 15,3-5).
Un caso muy significativo lo constituye la aparición de Moisés y Elías, los más grandes personajes del Antiguo Testamento, puesto que se trata de seres humanos que vivieron y murieron cientos de años antes de Cristo. "Seis días después, Jesús tomó consigo a Pedro, a Santiago y a Juan y los llevó a ellos solos a un monte alto. A la vista de ellos su aspecto cambió completamente. Incluso sus ropas se volvieron resplandecientes, tan blancas como nadie en el mundo sería capaz de blanquearlas. Y se les aparecieron Elías y Moisés, que conversaban con Jesús (Marcos 9,2-4).