SAN ARDON DE ESMARAGDO
7 de marzo
Ardón parece ser una
versión abreviada de su nombre de nacimiento, Smaragdo. Sabemos en
realidad muy poco de él; nació en el Languedoc, sur de Francia,
e ingresó desde niño en el monasterio de Aniano, donde era
abad el gran reformador de la vida benedictina en el siglo X, san Benito
de Aniano. San Ardón fue el escritor de la vida de su amigo y abad,
obra unánimemente alabada como una de las mejores frutos de la literatura
hagiográfica de la época. Sabemos que además escribió
otras obras, pero no han llegado hasta nosotros. En los elogios de su persona
se lo llama "maestro", aunque no queda claro si es por la sabiduría
manifiesta en los escritos o porque efectivamente ocupó un cargo de
enseñanza en el monasterio, como algunos afirman, y que es muy probable.
Fue además ordenado sacerdote.
Los Bolandistas no lo incluyen en Acta Sanctorum, porque -dicen
al mencionarlo entre los "excluidos" del día 7 de marzo- que no consta
su culto antiguo, y que, puesto que casi no han llegado datos fuera de la
mencionada biografía que escribió, no parece que debiera considerársele
santo. A esto responde Mabillon con una página de sus Acta Sanctorum
OSB donde destaca tres aspectos que dan muestras de que el culto al santo
comenzó con su muerte:
-La lectura en el breviario benedictino, que, aunque no transmite datos de
su vida, sí que refleja el culto que recibía en la Orden.
-La lápida sepulcral, que, aunque mal conservada, podía leerse
en ella las palabras de veneración en cinco versos, que el propio
Mabillon reconstruye, y de los que el último dirá que «brilló
entre los soles de la orden 3 décadas», ya que fue nombrado
abad el 814.
-La conservación y veneración de sus reliquias, que aunque
en algún momento se perdieron, permaneció el catálogo
de reliquias del monasterio, que indicaba que la cabeza se hallaba en una
caja de plata revestida en oro, y el cuerpo en un precioso cofre con incrustaciones.
En realidad debemos tener presente que con mucho menos de testimonios
de culto se encuentran inscriptos otros santos en el Martirologio, y parece
injusto relegarlo por carecer de detalles. La lápida nos informa del
año de su muerte, el 843, y que llegó a poco menos de los 60
años, por lo que podemos calcular que nació hacia el 784.