BEATO FRANCISCO BANDRÉS SÁNCHEZ
1936 d.C.
3 de agosto
En Barcelona, en España,
Beato Francisco Bandrés Sánchez, presbítero de la Sociedad
Salesiana y mártir, que, en tiempo de la misma persecución,
confirmó con su sangre su fidelidad al Señor.
Era natural de Hecho, diócesis
de Jaca y provincia de Huesca, donde nació el 24 de abril de 1896.
Cuando tenía nueve años su familia se trasladó a Huesca
e inscribió al niño en el colegio salesiano. En contacto con
los religiosos sintió la vocación a la vida salesiana y fue
acogido en la congregación el año 1914.
Hizo el noviciado y los votos religiosos y seguidamente los
estudios eclesiásticos, ordenándose sacerdote el año
1922. Tras prestar diferentes servicios se le encomendó, en 1927,
la dirección del colegio de Mataró, donde realizó una
magnífica labor hasta 1934 en que fue enviado a dirigir la casa de
Barcelona-Sarria.
Era un verdadero hombre de acción y de gobierno. Cuando
estalla la revolución del 18 de julio de 1936, procuró mantener
la serenidad y confiaba en que la presencia de tantos internos en el colegio
serviría de parapeto para que la casa fuera respetada. Pero el día
21 a las cinco de la tarde los religiosos fueron expulsados del colegio.
El director le dio a cada uno cien pesetas y les dijo que cada uno buscara
refugio donde mejor pudiera. No cabía hacer otra cosa. Él se
fue junto con otro religioso a la casa de su hermana Pilar, que los acogió.
Cuando supo la muerte de algunos religiosos quiso tomar el tren
para dirigirse al extranjero, pero al carecer de pasaporte no le fue posible.
En la noche del 3 de agosto varios milicianos se presentaron en casa de su
hermana preguntando por don Ramón Cambó, que era el administrador
del colegio. D. Francisco Bandrés dijo que no estaba pero que él
era el director. Entonces fue arrestado sin que sirvieran sus alegatos de
que su colegio hacía un gran bien social. Llevado al Hotel Colón,
que era la sede del POUM (Partido Obrero Unificado Marxista), le fue quitada
la vida en los calabozos.