SAN BRYCHAN DE BRECKNOCK
Siglo V d.C.
6 de abril
No se sabe nada de cierto
sobre su vida, pero según la leyenda es un santo rey de Gales que
tuvo 24 hijos, todos santos. Era hijo del rey Anlach de Garthmadrun, del
cual heredó el trono de Gwynedd. Cuando era pequeño fue enviado
por sus padres a Irlanda y después a Gales. Cuando tenía 4
años fue confiado a un santo varón de nombre Drichan, en la
rivera del río Ysgir, y tres años después podía
considerarse ya bastante instruido para afrontar el mundo. Su maestro, casi
ciego, después de extraño episodio le predijo un futuro próspero
y feliz.
Algunos años después estalló la guerra
entre el rey Anlach y Banadl, rey irlandés que usurpaba Powys. Fue
necesario enviar al príncipe Brychán como rehén para
defender las tierras ocupadas; fue tratado bien en la Corte de Banadl y se
enamoró locamente de Banhadlwedd, hija del rey. De esta irregular
relación, antes de que regresase a Gathmadrun, nació su hijo
primogénito, san Canoc. Mientras tanto, murió el rey Anlach
y los nobles eligieron como rey a Brychán, y su reinado fue próspero,
como le había predicho su maestro, tanto que sus subditos cambiaron
el nombre del reino en su honor y se llamó Brycheiniog. Fue un soberano
siempre fiel a la Iglesia y a sus enseñanzas. Se casó tres
veces y según la tradición tuvo 24 hijos venerados todos como
santos. Su segundo hijo, san Cledwyn, fue el heredero al trono.
Brychán testimonió repetidamente su piedad, pero
no dudó en recurrir al uso de la fuerza en las distintas ocasiones
en las que tuvo que defender sus tierras y el honor de su familia. El ejemplo
más claro fue cuando su hija mayor, santa Gladys, fue secuestrada
por su futuro marido, san Gundleo, conocido bandido y disoluto. Brychán
lo persiguió hasta que en una batalla, en la que cayeron bastantes
hombres, intervino providencialmente el mítico rey Arturo para pacificar
a los dos soberanos galeses. Muchas fueron las atrocidades cometidas por
Brychán en defensa de su reino, hasta que un día abdicó
del reino y se marchó a vivir vida eremítica. Brychán
murió anciano y fue sepultado en Ynys Brychan, hoy es la isla de Lundy.