BEATO CECILIO VEGA DOMINGUEZ
1936 d.C.
24 de julio
Cecilio Vega Domínguez
nació en 1913 en Villamor de Órbigo (León) en el seno
de una familia de humildes labradores que vivían del trabajo en el
campo. Cecilio comenzó el noviciado como Misionero oblato en 1930.
El día 15 del año siguiente hace su primera oblación
y pasa a Pozuelo para cursar los estudios eclesiásticos. En 1934 hace
su Oblación perpetua y se inicia en las órdenes menores (actuales
ministerios). Era subdiácono y estaba ya a las puertas del diaconado
y del sacerdocio.
A lo largo de su corta vida, se destaca en Cecilio su constancia
y tesón ante las dificultades que iba encontrando en los estudios,
entre otras causas, por un accidente desafortunado en el trabajo agrícola,
que le ocasionó la pérdida de un ojo. Hombre de buen corazón,
dócil, noble, piadoso y franco. De buen espíritu en la convivencia
con los demás.
También él, al igual que Manuel Gutiérrez,
tras dos días de incertidumbre, ansiedad y vejaciones en su propio
convento, es “sacado” de su propio domicilio en la noche del 24 de julio
de 1936 y fusilado de madrugada en la Casa de Campo.