BEATO EDUARDO GONZALEZ SANTO DOMINGO
1936 d.C.
5 de agosto
Nació en Ávila
el 5 de enero de 1884. Fue bautizado el 13 y confirmado el 26 de febrero
de 1891. Su madre era terciaria dominica. Huérfano de padre a los
tres años, su madre tuvo que buscar trabajo como empleada del hogar
en casa de D. Antonio Mata, capellán de las carmelitas de San José,
quien lo llevó a la residencia provincial de Ávila. A los once
años volvió con su madre. Después de un tiempo en Ocaña
hizo profesión como hermano cooperador en Ávila el 27 de diciembre
de 1914. Trabajó con fidelidad en los oficios de su profesión
en el colegio de La Mejorada (1917-1923), Ocaña (1924), Ávila
(1925-1930), casa de la Pasión de Madrid (1932-1933), convento del
Rosario, también de Madrid (1935-1936). Bondadoso, trabajador y caritativo,
de genio alegre, muy recogido y humilde.
Se daba perfecta cuenta del ambiente de hostilidad hacia la
religión que reinaba en Madrid a comienzos de 1936, preveía
el martirio e incluso lo deseaba. El 6 de junio lo asignaron a Ocaña,
donde el 22 de julio fue víctima del asalto al convento. Con los PP.
Maximino Fernández, Manuel Moreno y Víctor García Ceballos
salieron hacia Madrid con el propósito de buscar albergue para miembros
de la comunidad de Ocaña; en la estación les dieron un salvoconducto
que, en realidad, estaba marcado para la muerte. Los detuvieron en el «correo
de Cuenca». Llegados a la estación Atocha de Madrid, y ya vacío
el recinto, fueron allí mismo sacrificados mientras gritaban: «¡Viva
Cristo Rey! ¡Viva la Iglesia Católica!». Fue el 5 de agosto
de 1936. Contaba 52 años de edad.