EL ESCAPULARIO CARMELITA
El escapulario es un sacramental
Un sacramental es un objeto religioso que la Iglesia haya aprobado
como signo que nos ayuda a vivir santamente y a aumentar nuestra devoción.
Los sacramentales deben mover nuestros corazones a renunciar a todo pecado,
incluso al venial.
El escapulario, al ser un sacramental, no nos comunica gracias
como hacen los sacramentos sino que nos nos disponen al amor a Dios y a la
verdadera contrición del pecado si los recibimos con devoción.
Los seres humanos nos comunicamos por símbolos. Así como tenemos
banderas, escudos y también uniformes que nos identifican. Las comunidades
religiosas llevan su hábito como signo de su consagración a
Dios.
Los laicos no pueden llevar hábito, pero los que desean
asociarse a los religiosos en su búsqueda de la santidad pueden usar
el escapulario. La Virgen dio a los Carmelitas el escapulario como un hábito
miniatura que todos los devotos pueden llevar para significar su consagración
a ella. Consiste en un cordón que se lleva al cuello con dos piezas
pequeñas de tela color café, una sobre el pecho y la otra sobre
la espalda. (ver ilustración arriba). Se usa bajo la ropa. Junto con
el rosario y la medalla milagrosa, el escapulario es uno de los mas importantes
sacramentales marianos.
Dice San Alfonso Ligorio, doctor de la Iglesia: "Así
como los hombres se enorgullecen de que otros usen su uniforme, así
Nuestra Señora Madre María está satisfecha cuando sus
servidores usan su escapulario como prueba de que se han dedicado a su servicio,
y son miembros de la familia de la Madre de Dios."
¿Cómo se originó el escapulario?
La palabra escapulario viene del Latín "scapulae" que
significa "hombros". Originalmente era un vestido superpuesto que cae de los
hombros y lo llevaban los monjes durante su trabajo. Con el tiempo se le
dio el sentido de ser la cruz de cada día que, como discípulos
de Cristo llevamos sobre nuestros hombros. Para los Carmelitas particularmente,
pasó a expresar la dedicación especial a la Virgen Santísima
y el deseo de imitar su vida de entrega a Cristo y a los demás.
Virgen del CarmenLa Virgen María entrega el escapulario el
16 de julio de 1251
En el año 1246 nombraron a San Simón
Stock general de la Orden Carmelita. Este comprendió que, sin una
intervención de la Virgen, a la orden le quedaba poco tiempo. Simón
recurrió a María poniendo la orden bajo su amparo, ya que ellos
le pertenecían. En su oración la llamó "La flor del
Carmelo" y la "Estrella del Mar" y le suplicó la protección
para toda la comunidad.
En respuesta a esta ferviente oración, el 16 de julio
de 1251 se le aparece la Virgen a San Simón Stock y le da el escapulario
para la orden con la siguiente promesa: "Este debe ser un signo y privilegio
para ti y para todos los Carmelitas: quien muera usando el escapulario no
sufrirá el fuego eterno"
Aunque el escapulario fue dado a los Carmelitas, muchos laicos
con el tiempo fueron sintiendo el llamado de vivir una vida mas comprometida
con la espiritualidad carmelita y así se comenzó la cofradía
del escapulario, donde se agregaban muchos laicos por medio de la devoción
a la Virgen y al uso del escapulario. La Iglesia ha extendido el privilegio
del escapulario a los laicos.
La Santísima Virgen se apareció al Papa Juan
XXII en el siglo XIV y le prometió para quienes cumplieran los requisitos
de esta devoción que "como Madre de Misericordia con mis ruegos, oraciones,
méritos y protección especial, les ayudaré para que,
libres cuanto antes de sus penas, (...) sean trasladadas sus almas a la bienaventuranza".
Explicación de la Promesa:
Muchos Papas, santos y teólogos católicos han
explicado que, según esta promesa, quien tenga la devoción
al escapulario y lo use, recibirá de María Santísima
a la hora de la muerte, la gracia de la perseverancia en el estado de gracia
(sin pecado mortal) o la gracia de la contrición (arrepentimiento).
Por parte del devoto, el escapulario es una señal de su compromiso
a vivir la vida cristiana siguiendo el ejemplo perfecto de la Virgen Santísima.
El escapulario tiene 3 significados:
1) El amor y la protección maternal de María: El signo es
una tela o manto pequeño. Vemos como María cuando nace Jesús
lo envuelve en un manto. La Madre siempre trata de cobijar a sus hijos.
Envolver en su manto es una señal muy maternal de protección
y cuidado. Señal de que nos envuelve en su amor maternal. Nos hace
suyos. Nos cubre de la ignominia de nuestra desnudes espiritual.
Vemos en la Biblia:
-Dios cubrió con un manto a Adán y Eva después de que
pecaron. (manto - signo de perdón)
-Jonatán le dio su manto a David: símbolo de amistad
-Elías dio su manto a Eliseo y lo llenó de su espíritu
en su partida.
-S. Pablo: revístanse de Cristo: vestirnos con el manto de sus virtudes.
2)Pertenencia a María: Llevamos una marca que nos distingue como sus
hijos escogidos. El escapulario se convierte en el símbolo de nuestra
consagración a María.
Consagración: 'pertenecer a María' es reconocer
su misión maternal sobre nosotros y entregarnos a ella para dejarnos
guiar, enseñar, moldear por Ella y en su corazón. Así
podremos ser usados por Ella para la extensión del Reino de su Hijo.
-En 1950 Papa Pío XII escribió acerca del escapulario: "que
sea tu signo de consagración al Inmaculado Corazón de María,
lo cual estamos particularmente necesitando en estos tiempos tan peligrosos"
En las palabras del Papa vemos mas vez mas devoción a
la Virgen del Carmen es devoción a la Inmaculada.
Quien lleve el escapulario debe estar consciente de su consagración
a Dios y a la Virgen y ser consecuente en sus pensamientos, palabras y obras.
3) El suave yugo de Cristo: "Carguen sobre ustedes mi yugo y aprendan de
mi, porque soy paciente y humilde de corazón, y así encontrarán
alivio. Porque mi yugo es suave y mi carga liviana". (Mt 11:29-30)
-El escapulario simboliza ese yugo que Jesús nos invita a cargar
pero que María nos ayuda a llevar.
Quién lleva el escapulario debe identificarse como católico
sin temor a los rechazos y dificultades que ese yugo le traiga.
Se debe vivir lo que significa
El escapulario es un signo de nuestra identidad como católicos,
vinculados de íntimamente a la Virgen María con el propósito
de vivir plenamente según nuestro bautismo. Representa nuestra decisión
de seguir a Jesús por María en el espíritu de los religiosos
pero adaptado a la propia vocación. Esto requiere que seamos
pobres (un estilo de vida sencillo sin apegos materiales), castos
y obedientes por amor a Dios.
Al usar el escapulario constantemente hacemos silenciosa petición
de asistencia continua a la Santísima Madre. La Virgen nos enseña
e intercede para que recibamos las gracias para vivir como ella, abiertos
de corazón al Señor, escuchando Su Palabra, orando, descubriendo
a Dios en la vida diaria y cercano a las necesidades de nuestros hermanos.
El escapulario además es un recuerdo de que nuestra meta es el cielo
y todo lo de este mundo está pasando.
En momentos de tentación, tomamos el escapulario en nuestras
manos e invocamos la asistencia de la Madre, resueltos a ser fieles al Señor.
Ella nos dirige hacia el Sagrado Corazón de su Hijo Divino y el demonio
es forzado a retroceder vencido.
Imposición del Escapulario:
-La imposición se hace preferentemente en comunidad.
-Es necesario que en la celebración quede bien expresado el sentido
espiritual de las gracias unidas al Escapulario de la Virgen del Carmen y
los compromisos asumidos con este signo de devoción a la Santísima
Virgen.
-El primer escapulario debe ser bendecido por un sacerdote e impuesto por
él mientras dice la oración:
"Recibe este escapulario bendito y pide a la Virgen Santísima que
por sus méritos, lo lleves sin ninguna mancha de pecado y que te proteja
de todo mal y te lleve a la vida eterna"
Ver otras oraciones para la imposición del escapulario
¿Puede darse el escapulario a quien no es católico?
Sí. El escapulario es signo de la Maternidad Espiritual
de María y debemos recordar que ella es madre de todos. Muchos milagros
de conversión se han realizado en favor de buenos no-católicos
que se han decidido a practicar la devoción al escapulario.
Testimonios de Conversiones
Un anciano fue llevado al Hospital de San Simón Stock
en la ciudad de Nueva York, inconsciente y moribundo. La enfermera al ver
al paciente con el Escapulario Carmelita llamó a un sacerdote. Mientras
rezada las oraciones por el moribundo, éste recobró el conocimiento
y dijo: "Padre, yo no soy católico". "¿Entonces, ¿por
qué está usando el Escapulario Carmelita?", preguntó
el sacerdote. "He prometido a mis amigos usarlo", explicó el paciente.
"Además rezo un Ave María diariamente." "Usted se está
muriendo" replicó el sacerdote. "¿Quiere hacerse católico?"
'Toda mi vida lo he deseado", contestó el moribundo. Fue bautizado,
recibió la Unción de los Enfermos antes de fallecer en paz.
Juan Pablo II habla del escapulario >>>
Nuestra Señora del CarmeloLa Medalla Escapulario
La medalla-escapulario tiene en una cara la imagen del Sagrado
Corazón de Jesús y la imagen de la Bienaventurada Virgen María
en su reverso. En 1910, el Papa Pío X declaró que, una persona
válidamente investida en su escapulario de tela podía llevar
la medalla-escapulario en su lugar, provisto que tuviera razones legítimas
para sustituir su escapulario de tela por la medalla- escapulario. Esta concesión
fue hecha a petición de los misioneros en los países del trópico,
donde los escapularios de tela se deterioran pronto. Ahora bien, el Papa Pío
X y su sucesor, el Papa Benedicto XV, expresaron su profundo deseo de que
las personas continuaran llevando el escapulario de tela cuando fuera posible,
y que no sustituyeran el escapulario de tela por la medalla escapulario sin
que medie primero razón suficiente. La vanidad o el miedo a profesar
su fe en público no pueden ser razones que satisfagan a Nuestra Señora.
Personas de esta clase corren el riesgo de no recibir la promesa del escapulario
del Carmen. (tomado del panfleto "Otorga mucha importancia a tu escapulario"
del Apostolado Mundial de Fátima, Washington, NJ 07882-0976 USA).
Advertencias prácticas
Una vez bendecido el primer escapulario, el devoto no necesita pedir la
bendición para escapularios posteriores.
Los escapularios gastados, si han sido bendecidos no se deben echar a la
basura. Se pueden quemar o enterrar como signo de respeto.
Alerta contra abusos:
El escapulario NO salva por si solo como si fuera algo mágico
o de buena suerte, ni es una excusa para evadir las exigencias de la vida
cristiana. Mons. Kilian Lynch, antiguo general de la Orden Carmelita nos
dice: "No lleguemos a la conclusión que el escapulario está
dotado de alguna clase de poder sobrenatural que nos salvará a pesar
a pesar de lo que hagamos o de cuanto pequemos... Una voluntad pecadora y
perversa puede derrotar la ´omnipotencia suplicante´ de la madre
de la misericordia."
Los Papas y Santos han muchas veces alertado acerca de no abusar
de la promesa de nuestra madre como si nos pudiéramos salvar llevando
el escapulario sin conversión. El Papa Pío XI nos advierte:
"aunque es cierto que la Virgen María ama de manera especial a quienes
son devotos de ella, aquellos que desean tenerla como auxilio a la hora de
la muerte, deben en vida ganarse dicho privilegio con una vida de rechazo
al pecado y viviendo para darle honor"
Vivir en pecado y usar el escapulario como ancla de salvación
es cometer pecado de presunción ya que la fe y la fidelidad a los
mandamientos es necesaria para todos los que buscan el amor y la protección
de Nuestra Señora.
San Claude de la Colombiere advierte: "Tu preguntas: ¿y si yo quisiera
morir con mis pecados?, yo te respondo, entonces morirás en pecado,
pero no morirás con tu escapulario"
El Privilegio Sabatino: (sábado)
La Virgen rescata del purgatorioEste privilegio es una promesa
de la Virgen que consiste en la liberación del purgatorio el primer
sábado (día que la Iglesia ha dedicado a la Virgen) después
de la muerte por medio de una intercesión especial de la Virgen
Se originó en una bula o edicto que fue proclamado por
el Papa Juan XXII en marzo 3, 1322 como resultado de una aparición
que tuvo de la Virgen en la que prometió para aquellos que cumplieran
los requisitos de esta devoción que "como Madre de Misericordia, con
mis ruegos, oraciones, méritos y protección especial, les ayudaré
para que, libres cuanto antes de sus penas, sean trasladadas sus almas a la
bienaventuranza".
Condiciones para que aplique este privilegio
1) Usar el escapulario con fidelidad.
2) Observar castidad de acuerdo al estado de vida.
3) Rezo del oficio de la Virgen (oraciones y lecturas en honor a la Virgen)
o rezar diariamente 5 décadas del rosario.
El Papa Pablo V confirmó en una proclamación oficial
que se podía enseñar acerca del privilegio sabatino a todos
los creyentes.
El Escapulario y la Virgen de Fátima:
Es evidente que la Virgen María quiere revelarnos
de manera especial el escapulario. Reporta Lucia (vidente de Fátima,
hoy Hermana María del Inmaculado Corazón), que en la última
aparición (Octubre, 1917, día del milagro del sol), la Virgen
vino vestida con el hábito carmelita y con el escapulario en la mano
y recordó que sus verdaderos hijos lo llevaran con reverencia.
También pidió que los que se consagraran a ella lo usaran como
signo de dicha consagración.
Hablan los Papas y los Santos
El Beato Papa Gregorio X fue enterrado con su escapulario solo
25 años después de la Visión del Escapulario. 600 años
mas tarde cuando abrieron su tumba, su escapulario estaba intacto.
El Papa Pío XII habló frecuentemente del Escapulario.
En 1951, aniversario 700 de la aparición de Nuestra Señora
a San Simón Stock, el Papa ante una numerosa audiencia en Roma exhortó
a que se usara el Escapulario como "Signo de Consagración al Inmaculado
Corazón de María" (tal como pidió la Virgen en Fátima).
El Escapulario también representa el dulce yugo de Jesús que
María nos ayuda a sobrellevar. Y finalmente, el Papa continuó,
El Escapulario nos marca como hijos escogidos de María y se convierte
para nosotros (como lo llaman los alemanes) en un 'Vestido de Gracia".
El mismo día que S. Simón Stock recibió
de María el escapulario y la promesa, el fue llamado a asistir a un
moribundo que estaba desesperado. Cuando llegó puso el escapulario
sobre el hombre, pidiéndole a la Virgen que mantuviera la promesa
que le acababa de hacer. Inmediatamente el hombre se arrepintió, se
confesó y murió en gracia de Dios"
San Alfonso Ligorio y S. Juan Bosco tenían una especial
devoción a la Virgen del Carmen y usaban el escapulario. Cuando murió
San Alfonso Ligorio le enterraron con sus vestiduras sacerdotales y con su
escapulario. Muchos años después cuando abrieron su tumba encontraron
que su cuerpo y todas las vestimentas estaban hechas polvo, sin embargo su
escapulario estaba intacto. El escapulario de San Alfonso está en
exhibición en su Monasterio en Roma.
San Alfonso Ligorio nos dice: "Herejes modernos se burlan del
uso del Escapulario. Lo desacreditan como una insignificancia vana y absurda."
San Pedro Claver, se hizo esclavo de los esclavos por amor.
Cada mes llegaba a Cartagena, Colombia un barco con esclavos. San Pedro se
esforzaba por la salvación de cada uno. Organizaba catequistas, los
preparaba para el bautismo y los investía con el escapulario. Algunos
clérigos acusaron al santo de celo indiscreto. Sin embargo él
continuó su obra hasta tener mas de 300,000 conversos.
San Claudio de Colombiere (director espiritual de St. Margarita
María)
«Yo quería saber si María en realidad se
había interesado en mí, y en el escapulario Ella me ha dado
la seguridad más palpable. Sólo necesito abrir mis ojos, Ella
ha otorgado su protección a este escapulario: 'Quien muera vestido
en él no sufrirá el fuego eterno`.»
Dijo también: "Debido a que todas las formas de amar
a la Santísima Virgen y las diversas maneras de expresar ese amor
no pueden ser igualmente agradables a ella y por consiguiente no nos ayudan
en el mismo grado para alcanzar el cielo, lo digo sin vacilar ni un momento,
¡El Escapulario Carmelita es su predilecto!" y agrega "Ninguna devoción
ha sido confirmada con mayor número de milagros auténticos
que el Escapulario Carmelita".
Otros Testimonios:
"Un sacerdote de Chicago fue llamado para ir a asistir a un
moribundo que había estado lejos de su fe y de los sacramentos por
muchos años. El moribundo no quiso recibirlo, ni hablar con el. Pero
el sacerdote insistió y le enseñó el escapulario que
llevaba. Le preguntó si le permitiría ponérselo. El
hombre aceptó con tal que el sacerdote lo dejara en paz. Una hora
mas tarde el moribundo mandó a llamar al sacerdote pues deseaba confesarse
y morir en gracia y amistad con Dios"
El demonio odia el escapulario. Un día al Venerable
Francisco Yepes se le cayó el escapulario. Mientras se lo ponía,
el demonio aulló: "¡Quítate el hábito que nos
arrebata tantas almas!".
Un misionero Carmelita de Tierra Santa fue llamado a suministrar
la unción de los enfermos en el año 1944. Notó que mientras
caminaba, sus pies se hundían cada vez mas en el fango hasta que,
tratando de encontrar tierra firme, se deslizó en un pozo de fango
en el que se hundía hacia la muerte. Pensó en la Virgen y besó
su hábito el cual era escapulario. Miró entonces hacía
la Montaña del Carmelo gritando: "¡Santa Madre del Carmelo! ¡Ayúdame!
¡Sálvame!". Un momento mas tarde se encontró en terreno
sólido. Atestiguó mas tarde: "Sé que fui salvado por
la Santísima Virgen por medio de su Escapulario Carmelita. Mis zapatos
desaparecieron en el lodo y yo estaba cubierto de él, pero caminé
las dos millas que faltaban, alabando a María".
Salvados del Mar
En el verano de 1845 el barco inglés, "Rey del Océano"
se hallaba en medio de un feroz huracán. las olas lo azotaban sin
piedad y el fin parecía cercano. Un ministro protestante llamado Fisher
en compañía de su esposa e hijos y otros pasajeros fueron a
la cubierta para suplicar misericordia y perdón. Entre la tripulación
se encontraba el irlandés John McAuliffe. Al mirar la gravedad de
la situación, el joven abrió su camisa, se quitó el
Escapulario y, haciendo con él la Señal de la Cruz sobre las
furiosas olas, lo lanzó al océano. En ese preciso momento el
viento se calmó. Solamente una ola más llegó a la cubierta,
trayendo con ella el Escapulario que quedó depositado a los pies del
muchacho.
Durante lo acontecido el ministro había estado observando
cuidadosamente las acciones de McAuliffe y fue testigo del milagro. Al interrogar
al joven se informaron acerca de la Santísima Virgen y su Escapulario.
El Sr. Fisher y su familia resolvieron ingresar en la Iglesia Católica
lo más pronto posible y así disfrutar la gran protección
del Escapulario de Nuestra Señora.
Un Hogar Salvado del Fuego
En mayo de 1957, un sacerdote Carmelita en Alemania publicó
una historia extraordinaria de cómo el Escapulario había librado
un hogar del fuego. Una hilera completa de casas se habían incendiado
en Westboden, Alemania. Los piadosos residentes de una casa de dos familias,
al ver el fuego, inmediatamente colgaron un Escapulario a la puerta de la
entrada principal. Centellas volaron sobre ella y alrededor de ella, pero
la casa permaneció intacta. En 5 horas, 22 hogares habían sido
reducidos a cenizas. La única construcción que permaneció
intacta, en medio de la destrucción, fue aquella que tenía
el Escapulario adherido a su puerta. Los cientos de personas que vinieron
a ver el lugar que Nuestra Señora había salvado son testigos
oculares del poder del Escapulario y de la intercesión de la Santísima
Virgen María.
El Escapulario aviva el fervor
En Octubre de 1952, un oficial de la Fuerza Aérea en
Texas escribió lo siguiente: "Seis meses después de comenzar
a usar el Escapulario, experimenté un notable cambio en mi vida. Casi
inmediatamente comencé a asistir a Misa todos los días. Durante
la cuaresma viví fervorosamente como nunca lo había hecho.
Fui iniciado en la práctica de la meditación y me encontré
realizando débiles intentos en al camino de la perfección.
He estado tratando de vivir con Dios y doy el crédito al Escapulario
de María".
Recordemos que el escapulario es un signo poderoso del amor
y protección maternal de María y de su llamada a una vida de
santidad y sin pecado.
Usar el escapulario es una respuesta de amor a la Madre que
vino a darnos un regalo de su misericordia. Debemos usarlo como recordatorio
que le pertenecemos a ella, que deseamos imitarla y vivir en gracia bajo
su manto protector.