BEATO JACOBO PAPPOCHI DE MONTIERI
1289 d.C.
27 de julio
Nació en Montieri (Grosseto,
Italia). De profesión minero de la plata del pueblo. Acusado un hurto
del preciado mineral de la zeca del lugar, fue castigado con la amputación
de la mano derecha y del pie izquierdo. Se retiró a un eremo en una
pequeña celda adyacente a la antigua iglesia episcopal de Santiago
el Mayor y se hizo emparedar y le llamaron “el Murato”. Confortado de visiones,
entre ellas la visión de la milagrosa Comunión Eucarística
impartida por el mismo Jesús, vivió en aquella celda en rigurosa
penitencia durante 46 años.
No sólo por sus dones taumatúrgicos sino por su
vida santa, fue tenido como santo por sus conciudadanos, hasta que fue aprobado
su culto por el papa Pío VI en 1798, ya que la documentación
sobre su beatificación se perdió. Su nombre está inserito
en el “Propio de los Santos de la diócesis de Volterra” y su cuerpo
está conservado en la iglesia parroquial de Montieri donde es venerado.