Gnósticos del siglo
I que se originaron a orillas del río Jordán. Defendían
que el alma del hombre será liberada finalmente de la cárcel
del cuerpo y de los ataques del demonio por un redentor llamado Manda de
Hayye, personificación de la ciencia de la vida que venció
a los poderes de mal cuando vivió en la tierra. Desde el periodo bizantino,
los mandeos han mantenido una actitud de hostilidad hacia el cristianismo,
considerando a Jesús un falso mesías. En cambio veneran a Juan
Bautista, poniendo especial énfasis en la importancia de repetir frecuentemente
el bautismo, como rito de purificación. En la actualidad están
ubicados en un área al sur de Bagdad. También reciben el nombre
de sabianos. Son unos 6.000.