BEATO MANUEL GUTIERREZ CEBALLOS
1936 d.C.
22 de diciembre
Nació en Torrelavega
(Santander) el 4 de febrero de 1876, bautizado el día 7; muy pronto
huérfano de padre, vivió con su madre en Riocorvo y Las Caldas
de Besaya; acogido por los frailes en esta localidad como fámulo descubrió
su vocación religiosa; estudió en la escuela apostólica
y posteriormente hizo el noviciado y profesó en Padrón (La
Coruña) el 10 de septiembre de 1892; estudió allí y
en el convento de Corias filosofía; en Salamanca hizo los estudios
teológicos y recibió el presbiterado el 25 de febrero de 1899.
A partir de 1900 fue misionero por diferentes pueblos de España;
pasó al Perú con el deseo de integrarse en las misiones del
Amazonas, pero ante el éxito de sus predicaciones lo retuvieron en
la ciudad de Lima; estuvo en Perú desde 1913 a 1917 y, al regresar
de América, pasó a Las Caldas de Besaya; en 1923 trasladado
al convento del Olivar, de Madrid; en 1924 superior de la casa de Pamplona,
año en que recibió el título de predicador general;
en 1926 pasó al convento de Atocha, Madrid, al año siguiente
lo destinaron a desempeñar la cátedra de elocuencia sagrada
en San Esteban de Salamanca; en 1932 se incorporó al convento de Valladolid
y al año siguiente al de San Pablo de Palencia; en marzo de 1936 fue
trasladado a Las Caldas de Besaya. Gran predicador, entusiasta y convincente;
solía confesarse antes de subir al púlpito. Detenido con el
resto de la comunidad sufrió el martirio en la noche del 22 al 23
de diciembre de 1936, en la bahía de Santander.