BEATO MARCO BARKWORTH
1601 d.C.
27 de febrero
Ana Line (Anne Line, o Lyne)
fue una mártir inglesa, martirizada el 27 de febrero de 1601, hija
de William Heigham de Dunmow (Essex), caballero de buena posición
económica y un ardiente calvinista. Cuando ella y su hermano manifestaron
su intención de convertirse en católicos, ambos fueron repudiados
y desheredados por su padre. Ana contrajo matrimonio con Roger Line, converso
como ella, pero poco después de su casamiento, fue detenido por asistir
a misa. Tras un breve confinamiento, fue puesto en libertad y se le permitió
ir al exilio en Flandes, donde murió en 1594. Cuando el padre John
Gerard estableció una casa de refugio para sacerdotes en Londres,
se puso a cargo a la señora Line.
Después de que el padre Gerard escapara de la Torre en
1597, y al mismo tiempo que las autoridades comenzaban a sospechar que Line
le ayudaba, se mudó a otra casa, que convirtió en centro de
reuniones para los católicos vecinos. El día de la Purificación
(1601), el padre Francis Page, S.J., estaba a punto de celebrar misa en dicho
edificio, cuando entraron cazadores de sacerdotes. El padre Page inmediatamente
se quitó la vestimenta religiosa y se mezcló con los demás;
mas bastó la presencia de un altar preparado para la ceremonia para
arrestar a la señora Line. Fue enjuiciada en Old Bailey el 26 de febrero
de 1601, y acusada según el acta 27 de la reina Isabel, es decir,
por dar albergue a un sacerdote, aun cuando esto no podía probarse.
El día siguiente fue llevada a la horca, y proclamando valientemente
su fe alcanzó el martirio por el que había rogado. Su destino
lo compartieron dos sacerdotes, los beatos Mark Barkworth, O.S.B., y Roger
Filcock, S.J., que fueron ejecutados al mismo tiempo. [Ana fue canonizada
por SS Pablo VI en octubre de 1970.]
Roger Filcock había sido por mucho tiempo amigo y frecuente
confesor de la señora Line. Después de entrar en la universidad
inglesa de Reims en 1588, fue enviado junto con otros en 1590 a colonizar
el seminario de San Albán en Valladolid, y, una vez que terminó
allí sus cursos, fue ordenado y enviado a la misión inglesa.
El padre Garnett le hizo pasar un periodo de prueba de dos años para
comprobar su temple antes de admitirlo a la Sociedad de Jesús. Al
ver que era ferviente y valeroso, lo admitió finalmente. Ya iba a
cruzar hacia el continente para cumplir su noviciado cuando fue arrestado
por sospechas de ser sacerdote y fue ejecutado tras un juicio que más
bien parecía una farsa.