Nació en Bolonia (Italia) en 1405, de familia noble y acomodada. Cursó brillantemente estudios universitarios, pero en 1431, después de renunciar a sus bienes, vistió el hábito franciscano. Ordenado de sacerdote, se dedicó a la predicación, en la que se encontró con santos apóstoles: Bernardino de Siena, Juan de Capistrano, Jaime de la Marca. Recorrió pueblos y ciudades de Italia, y de varios países de Europa, proponiendo el Evangelio a las gentes e invitándolas a la conversión.

    De modo particular se empeñó en pacificar los ánimos y restablecer la concordia entre facciones y ciudades enfrentadas, así como en promover la asistencia a los pobres, para lo que fundó Montes de Piedad y combatió a los usureros. Colaboró con san Juan de Capistrano en la renovación interna de la Orden, y le sucedió como Vicario General de los Observantes. Murió en Piacenza (Italia) el 10 de abril de 1479.