Ella nació Anna Maria Bentivoglio en Roma , el duodécimo hijo del conde Domenico Bentivoglio de Bolonia y de Angela Sandreda, un aristócrata de origen francés, que llamó a su Annetta. Su padre era un oficial de la Grande Armée durante las guerras napoleónicas que más tarde se convirtió en un general del ejército papal y el gobernador de Roma .Cuando era niña, ella y su hermana mayor Elena se matriculó en la escuela de la ciudad a cargo de la Sociedad del Sagrado Corazón , donde otra hermana, Agata, era un miembro de la comunidad religiosa. Cuando su hermana fue trasladada a enseñar en la escuela de la Sociedad en Turín en 1842, María Magdalena fue trasladado a esa escuela, donde estudió durante los próximos seis años. 

   Bentivoglio creció en una joven hermosa e independiente. ^[2] Después de la muerte de su padre (1851) y su madre (1860), sin embargo, por consideración para el servicio del conde Papa Pío IX tomó la responsabilidad de ella y de su dos restantes hermanas solteras, Constanza y Matilda, y los pusieron bajo la tutela del cardenal Borromeo Edoardo , que coloca a las mujeres jóvenes en un monasterio por el bien de la decencia. Atraído por la vida en una orden religiosa cerrado comprometida con la pobreza estricta, cuando sus dos hermanas entraron en el Monasterio de San Lorenzo en Panisperna , el primer monasterio de Clarisas en la ciudad de Roma , que siguió a la Regla de Santa Clara , modificado por el Papa Urbano IV , Anna Maria también solicita la admisión. Ella fue recibida el 16 de julio de 1864, y recibió el hábito religioso el 4 de octubre de 1865, el día de la fiesta de San Francisco de Asís .

   En 1875, después de la toma de los Estados Pontificios por el Reino de Italia , al igual que otras comunidades religiosas del Monasterio de San Lorenzo enfrentó a cerrar por el nuevo gobierno. En ese mismo tiempo, la madre de Ignacio Hayes , OSF , el Inglés fundadora de las Hermanas Franciscanas de la Inmaculada Concepción en Little Falls, Minnesota , en los Estados Unidos, trató de tener una presencia contemplativa como parte de su fundación. Con este fin se fue a Italia para enrolarse miembros del claustro franciscano Segunda Orden y se acercó a las autoridades eclesiásticas con esta propuesta. Ella visitó el monasterio en Roma, donde varias de las monjas se ofrecieron como voluntarios para embarcarse en esta nueva aventura. El Ministro general de la Hermanos Menores , Bernardino da Portoguaro, dio su visto bueno a la propuesta y solicitó el permiso de la Santa Sede para que algunas monjas de la orden de abandonar su claustro con el fin de viajar a Estados Unidos para esto. 

   Bentivoglio, junto con su hermana, la madre María Constanza Bentivoglio, fue elegido para ir a los Estados Unidos por el Papa Pío IX , quien nombró a María Magdalenaabadesa de la nueva fundación y Constanza su vicaria , que iban a ser acompañado por un franciscano Fray Paulino de Castellaro, que había nombrado su director espiritual ycapellán . El 12 de agosto de 1875, Castellaro y Hayes fueron al monasterio para acompañar a las monjas al Palacio Vaticano , donde asistieron a la audiencia general del Papa Pío y recibieron una especial bendición por él. Luego viajaron a Niza en Francia, donde se reunieron con el Ministro General. En ese momento les dio documentos formales de su comisión a la empresa y se transfiere a las monjas de la Urbanista La observancia de la Regla de Santa Clara, seguido por el Monasterio de San Lorenzo a la de la Primitiva Observancia, que siguió a la Regla mitigada de St . Clare, y prohibió la propiedad corporativa de la propiedad de las monjas. Luego fueron al monasterio de Clarisas en Marsella, que siguió a aquella forma de la Regla de Santa Clara, que se familiaricen con sus diferencias.

   Hayes reservó un pasaje a los Estados Unidos a partir de ahí para el grupo. Ellos abordaron el vapor Castalia el 11 de septiembre y el rumbo a la ciudad de Nueva York .Llegaron allí el 12 de octubre de ese año, Día de la Raza . Una vez allí, sin embargo, Castellaro expresó dudas en el proyecto y asesoró a las monjas a permanecer en Nueva York y esperar nuevas instrucciones del Ministro general en lugar de proceder a Minnesota con Hayes. Sin saber qué hacer, siguieron este consejo, contando para el apoyo de otro sacerdote, Isaac Hecker , fundador de los Padres Paulistas . Esta espera se prolongó hasta junio de 1876, cuando Bernardino les ordenó abandonar el plan para la fundación de Hayes, ya que habría incluido operar una escuela para niñas pobres, en contra de su compromiso con el puramente contemplativa vida. Él les dirige además a tratar de establecerse en una de las tres diócesis en los Estados Unidos. 

   Bentivoglio se acercó entonces cardenal John McCloskey , el arzobispo de Nueva York , para ver si iba a recibirlos para establecer una comunidad monástica en la Arquidiócesis. El cardenal se negó a hacerlo, diciéndole que una orden religiosa cerrado no era compatible con el modo de vida americano. Los próximos arquidiócesis en la lista, el de Cincinnati , hicieron lo mismo. En agosto 1876 las monjas fueron a Filadelfia , donde se reunieron con el arzobispo, quien les dio hospitalidad en una casa de su propiedad, pero que con el tiempo también se negó su petición. Las dos hermanas viajaron alrededor de la región, en busca de una diócesis que aceptarlas. Los obispos quienes contactaron sería normalmente asesorar a las monjas para cambiar a la formación de una comunidad de activos hermanas religiosas que participan en la enseñanza o de servicio social en su lugar. Las hermanas Bentivoglio quedaron comprometidos con su vocación monástica, sin embargo.

   Por último, en el implorante de una mujer en Nueva Orleans , que fue miembro de la Tercera Orden de San Francisco , en diciembre de 1876 el arzobispo de Nueva Orleans ,Napoléon-Joseph Perché , invitó a las hermanas Bentivoglio establecer su comunidad allí. Esta fue su primera invitación formal por una diócesis estadounidense. Llegaron 03 1877 y tomaron posesión de una casa de campo en la ciudad. Sus dos primeros postulantes se unieron a ellos de forma rápida y las monjas comenzaron a planificar el establecimiento de un monasterio.

   Esto no fue a la última, sin embargo, como el franciscano Ministro Provincial con sede en St. Louis , que había sido delegada autoridad sobre las monjas, que llegó julio y les ordenó salir de Nueva Orleans para Cleveland. La pequeña comunidad se trasladó allí en agosto de 1877. Su residencia era una fábrica de cigarros convertido. Además el fraile pronto les aconsejó que fueran a tomar en un grupo de Clarisas Coletinas exiliados de Alemania debido a la política de esa nación Kulturkampf , cerrando las instituciones católicas. Además, tenían que utilizar la lengua alemana y, contrariamente al mandato del Ministro general, debían observar la Regla Colettine. 

   Cuando al tanto de la insistencia del Ministro Provincial de la monja de seguir las prácticas de las monjas alemanas, a principios de 1878 recibieron una carta suya en la que se les aconsejó que salir, ya sea de regresar a Nueva Orleans o comenzar de nuevo en otro lugar. Las hermanas Bentivoglio dejaron Cleveland el 27 de febrero, acompañado por los tres novicios de la comunidad. Por iniciativa de la Madre Constanza, que luego se separaron para llevar a cabo la recaudación de fondos y la búsqueda de un nuevo hogar.

   Constanza Bentivoglio y su compañero salieron para la costa oeste , mientras que María Magdalena regresó a la ciudad de Nueva York con sus compañeros. En el transcurso del viaje, Constanza se reunió un católico rico, el filántropo John A. Creighton , que hizo una oferta para financiar el costo de la construcción de un monasterio para las monjas.Madre Constanza inmediatamente escribió a la madre María Magdalena a aconsejarla de esta oferta, que de inmediato en contacto con James O'Connor , el primer obispo de Omaha , a quien conocía de su estancia en Filadelfia. Él dio la bienvenida oficial a la comunidad, aunque advirtió que él no era capaz de ofrecerles ningún tipo de apoyo financiero. Su pequeño grupo luego viajó de Nueva York a Omaha, donde llegaron el 15 de agosto de 1878. 

   Las monjas de inmediato comenzaron a organizar la recaudación de fondos y la planificación necesaria para la construcción de un monasterio. Los esfuerzos necesarios para que esto no era desdeñable, como el nuevo edificio fue destruido por los tornados en dos ocasiones, mientras que todavía en construcción. Las luchas tuvieron éxito, aunque, como el Papa Pío IX emitió una bula papal que se establece el monasterio de Clarisas de la Primitiva Observancia de los Estados Unidos en Roma el 15 de noviembre de 1881. El monasterio luego creció hasta el punto de que una nueva fundación se hizo de nuevo en Nueva Orleans en 1885. 

   Más tarde, después del regreso de Bentivoglio a Omaha, una de las monjas no hecho acusaciones graves contra ella y su hermana de ambos incorrección personal y financiera.Ellos fueron puestos bajo interdicto y se vieron obligados a abandonar el monasterio de alojarse en un convento de las Hermanas de la Misericordia , bajo cuya supervisión se vivió.  Ellos tuvieron que someterse a varios procesos judiciales, entre ellos uno por el Vaticano que duró casi dos años , antes de que fueron absueltos de todos los cargos.

   Bentivoglio hizo su última fundación en Evansville, Indiana , en 1897, debido a una herencia de un familiar de una de las monjas. El nombramiento de Constanza como abadesa del monasterio de Omaha, ella llevó otros siete monjas allí para fundar el nuevo monasterio, que fue dedicada el 12 de agosto de ese año, el día de la fiesta de Santa Clara.  Los primeros años de la comunidad eran no es fácil, ya que tuvieron que vivir sin ningún mueble en absoluto, que tiene sólo las cajas en las que sus pertenencias habían sido empaquetados. Las monjas de la nueva comunidad menudo sobrevivían con pan y agua. Bentivoglio compartió esta lucha hasta su muerte allí en 1905. Su hermana Constanza le había pre-fallecido en 1902.

   Los restos de Bentivoglio fueron exhumados en 1907, momento en el que se encontró que era incorrupta . Lo mismo ocurrió cuando fueron exhumados nuevamente en 1932.  Esto se hizo como resultado de la aceptación por parte de la Santa Sede de su canonización en estudio. Para el año 2000, más de 20 monasterios clarisas en los Estados Unidos y Canadá remontan sus orígenes a labores de Bentivoglio. Tenían una membresía combinada de alrededor de 350 monjas.