MILAGRO EUCARÍSTICO DE ASTI
En la mañana del 25
de julio de 1535, durante la Misa que se celebraba en la iglesia de San Segundo
(Asti, Italia), en el momento de la fracción del Pan, de las dos partes
de la Hostia consagrada salieron gotas de Sangre, que cayeron sobre el cáliz
y sobre la patena, empapando también los dedos del celebrante. A
diferencia de otros casos similares, tras algunos minutos todo desapareció
y hoy no tenemos ningún signo visible del prodigio.