BEATA MARÍA DE JESÚS
1936 d.C.
23 de julio
Vicenta Jordá Martí
nació en Zorita (Castellón) en el seno de una familia de campesinos
en 1899. Ingresó a los 22 años en el convento de Monjas Mínimas
de Barcelona, tomando el nombre de María de Jesús. En 1924
emitió los votos solemnes, pero tuvo que repetirlos en 1935 a causa
de un defecto de forma.
Según varios testimonios: “Sobresalía de una manera
especial en el recogimiento, siendo muy amante del silencio y vida interior.
Su refugio era la oración. Manifestó que se había “ofrecido
totalmente al Señor” A su lado todos se encontraban a gusto. En la
comunidad tenía fama de santidad". Ayudaba mucho a la religiosa profesa
con votos temporales que tenía como ayudante y que no tenía
tanta iniciativa.
Cuando en julio de 1936 tuvieron que abandonar el convento y
refugiarse en otro lugar, parece que refirió a la Madre Consuelo que
tenía miedo de poner en peligro su virginidad pero no del martirio.
Pero después que su hermana en religión la animó, se
puso en oración y, un momento después, le dijo: “He dado todo
al Señor, que haga de mi lo que quiera; estoy completamente confiada
en Dios”.
Cuando el 23 de julio la torre en la que se habían escondido
fue asaltada por los milicianos, nuestra beata se escondió en un lugar
apartado para orar y cuando fue descubierta, se entregó voluntariamente.
Fue martirizada a la edad de 37 años y 15 de vida religiosa. Era la
más joven del grupo y de la autopsia del cadáver se supo que
no había sido violada.