LA NATIVIDAD DE LA SANTÍSMA VIRGEN
MARÍA
8 de septiembre
Un anticipo y anuncio inmediato
de la redención obrada por Jesucristo es el nacimiento de su Madre
la Virgen María, concebida sin mancha de pecado, llena de gracia y
bendita entre todas las mujeres.
En Jerusalén, en la Iglesia de Santa Ana. La primera
fuente de la narración del nacimiento de la Virgen es el apócrifo
Protoevangelio de Santiago, que coloca el nacimiento de la Virgen en Jerusalén,
en el lugar en que debió existir una basílica en honor a la
María Santísima, junto a la piscina probática, según
cuentan diversos testimonios entre los años 400 y 600. Después
del año 603 el patriarca Sofronio afirma que ése es el lugar
donde nació la Virgen. Posteriormente, la arqueología ha confirmado
la tradición.
La fiesta de la Natividad de la santísima Virgen surgió
en oriente, y con mucha probabilidad en Jerusalén, hacia el s. v. Allí
estaba siempre viva la tradición de la casa natalicia de María.
La fiesta surgió muy probablemente como dedicación de una iglesia
a María, junto a la piscina probática; tradición que
se relaciona con el actual santuario de Santa Ana.