SAN PEDRO ALMATÓ RIBEIRA
1861 d.C.
1 de noviembre



   Pedro nació en San Feliú de Saserra (Barcelona) en 1830. Ingresó en el seminario de Vich, donde se destacó por su dedicación al estudio; allí coincidió con san Antonio María Claret, a quien le pidió consejo y le animó a ingresar en la Orden de Predicadores. En 1847 ingresó en el convento dominico de Ocaña, que era el único convento abierto de España, en una época de cierre de los conventos religiosos, porque era el único que se dedicaba a formar a misioneros para Oriente.

   Fue enviado a Manila, para completar los estudios y recibir el sacerdocio. Durante dos años se dedicó a ayudar en el trabajo pastoral de otras parroquias, aprender las lenguas orientales. En 1855, fue enviado al Vietnam como misionero; él ya sabía de la persecución religiosa, pero a pesar de ello quiso ir. No pudo dedicarse por entero a su misión, porque cayó enfermo y tuvo que conformarse con reducir su apostolado en una zona bastante tranquila. Cuando fray Jerónimo Hermosilla fue nombrado obispo del vicariato, le nombró su ayudante y a partir de entonces su vida se unió a la de su obispo, en huidas y correrías.

   En octubre de 1861, fueron apresados por la denuncia de un cristiano traidor. Cargados de cadenas llegaron a la capital del reino, y allí, en el camino habían puesto un crucifijo para que fuera pisoteado, pero fray Pedro, se arrodilló y besó el crucifijo, de manera que tuvieron que retirarlo. Mártir en Hai Duong, Tonkin (Vietnam) junto con Jerónimo Hermosilla y Valentín Berriochoa. Lo tuvieron metido en una jaula donde se preparó para el martirio. Murió rezando el rosario. Fue el más joven del grupo de mártires dominicos del Vietnam.  

Página Principal
(Samuel Miranda)