BEATO PEDRO DE SANTA MARÍA
1627 d.C.
29 de julio
Pedro de Santa María
era un japonés, nacido en 1610, a los trece años, bajo la dirección
del padre Luis Bertrán, empezó a instruirse como catequista.
Desde entonces ayudó siempre a este misionero, llegando a sustituirle
en muchos menesteres del apostolado: fomentar la piedad, robustecer la fe
de los cristianos, visitar a los renegados e infundir ánimos a los
perseguidos. Con el padre Bertrán compartió el cobijo en casa
de las leprosas y la cárcel de Kuwara, en Omura. En prisión
hizo profesión religiosa en los dominicos como hermano cooperador,
y fue quemado vivo.