BENDICIONAL





Bendición del agua


En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Amén.
Dios, que del agua y del Espíritu Santo, nos ha hecho nacer de nuevo en Cristo,
esté con todos ustedes.
Y con tu espíritu.


Con esta bendición del agua, recordamos a Cristo, agua viva, así como el sacramento
del bautismo, en el cual nacimos de nuevo del agua y del Espíritu
Santo.
Siempre,  pues,  que  seamos  rociados  con  esta  agua  o  que  nos santigüemos con
ella al entrar en la iglesia o dentro de nuestras casas, daremos gracias
a Dios
por su don inexplicable, y pediremos su ayuda para vivir siempre de acuerdo
con las exigencias del bautismo, sacramento de la fe, que un día recibimos.


ORACIÓN DE BENDICIÓN


Bendito  seas,  Señor,  Dios  todopoderoso,  que  te  has  dignado bendecirnos y
transformarnos  interiormente  en  Cristo,  agua  viva  de  nuestra salvación; haz, te
pedimos, que los que nos protegemos con la aspersión o el uso
de esta agua
sintamos, por la fuerza del Espíritu Santo, renovada la juventud de nuestra alma
y andemos siempre en una vida nueva. Por Jesucristo, nuestro
Señor.
Amén.
O bien:
Señor,  Padre  santo,  dirige  tu  mirada  sobre  nosotros,  que, redimidos por tu
Hijo, hemos nacido de nuevo del agua y del Espíritu Santo en la fuente
bautismal; concédenos, te pedimos, que todos los que reciban la aspersión de
esta agua queden renovados en el cuerpo y en el alma y te sirvan con limpieza
de vida. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.


(Después de la oración de bendición, el celebrante rocía con el agua bendecida
a los presentes, diciendo, según las circunstancias:)


Que esta agua nos recuerde nuestro bautismo en Cristo, que nos redimió con
su muerte y resurrección.
de mí, que soy un pecador.

 


CONFESIÓN SACRAMENTAL


Rito breve de la confesión


S. EI Señor esté en tu corazón para que te puedas arrepentir y confesar humildemente tus








pecados.


P. Jesús, Hijo de Dios, apiádate
 
S. Dios, Padre misericordioso, que reconcilió consigo al mundo
por      la      Muerte      y      la
Resurrección
de   su   Hijo   y   derramó   el
Espíritu
Santo para la remisión de los pecados, te conceda, por el ministerio   de   la   Iglesia,   el perdón
y la paz.
Y YO TE ABSUELVO DE TUS PECADOS EN
EL  NOMBRE  DEL  PADRE,  Y DEL HIJO, +
Y DEL ESPÍRITU SANTO. P. Amén.
S. La Pasión de nuestro Señor Jesucristo, la intercesión de la Bienaventurada Virgen María y de todos los Santos, el bien que
hagas y el mal que puedas sufrir,
 
te sirvan como remedio de tus pecados, aumento de gracia y premio de vida eterna. Vete en paz.     R. Amén





Bendición de un vehículo


Nuestro auxilio es el nombre del Señor. Que hizo el cielo y la tierra


Oremos. Dios todopoderoso, creador del cielo y la tierra, que, en tu
gran sabiduría, encomendaste al hombre hacer cosas grandes y bellas, te pedimos por los que usen este vehículo: que recorran su
camino con precaución y seguridad, eviten toda imprudencia peligrosa para los otros, y, tanto si viajan por placer o por necesidad, experimenten siempre la compañía de Cristo, que vive
y
reina contigo por los siglos de los siglos. R. Amén.





Bendición de una casa


Dirijamos nuestra oración a Cristo que nación de la Virgen María y habitó entre nosotros, para que se digne entrar en esta casa y bendecirla con su presencia.
Cristo, el Señor, esté aquí, en medio de ustedes, fomente su caridad fraternal, participe en sus alegrías, les consuele en las tristezas.


Oración de bendición:


Asiste, Señor, a estos hijos tuyos que, al inaugurar esta vivienda, imploran humildemente tu bendición, para que, cuando vivan en
ella, sientan tu presencia protectora, cuando salgan, gocen de tu compañía, cuando regresen, experimenten la alegría de tenerte como huésped, hasta que lleguen felizmente a la estancia preparada para ellos en la casa de tu Padre. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.


Bendición de los que van a emprender un viaje


Dios todopoderoso y eterno, que hiciste salir a Abraham de su tierra y de la casa de su padre y lo guardaste sano y salvo en los caminos de su peregrinación, protégenos también a nosotros, tus servidores; sé para todos, Señor, apoyo en la preparación del viaje, compañía y solaz durante el camino, y ayuda en las dificultades, para que, guiados por Ti, lleguemos al término de nuestro viaje y regresemos felizmente a nuestro hogar. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.



Bendición de un local, fábrica o comercio


Señor y Dios nuestro al reunirnos gozosos para inaugurar este local, queremos unir nuestra alegría ala acción de gracias por tus beneficios. Por eso hoy elevamos hacia ti nuestro espíritu agradecido al recibir esta bendición como un signo de tu cercanía.


Señor, Dios, nuestro Padre, estamos reunidos en tu nombre y según tu Palabra. Te entregamos este local, para que Tú lo consagres con todo lo que hay y a cuantos van a trabajar en este centro de actividad laboral.
Tú nos has dado todo esto por tu gran misericordia. Considera como propiedad tuya a todos los que estamos aquí y todas estas cosas. Hazte presente con tu luz y con tu fortaleza y haz que sintamos tu presencia en la paz, en la armonía, en una diligente laboriosidad, en nuestro sentido de responsabilidad y en el respeto de todos para con todos.
Que cuantos trabajen aquí, procuren comportarse como hijos e hijas tuyos en un ambiente de justicia y solidaridad, reconociendo que tener trabajo es un favor tuyo inapreciable para nosotros y nuestras familias.


(ministro)
Te bendecimos, Padre, porque en este lugar de encuentro es posible construir relaciones fraternas, justas y solidarias, que contribuyan al
desarrollo y bienestar de todos. Junto a las alabanzas te suplicamos que descienda tu bendición + sobre nuestras vidas y nuestros trabajos, para que desde este lugar que hoy inauguramos, nos hagamos dignos de participar un día en el templo invisible de tu gloria. Por Cristo,
nuestro Señor. Amén.

 


Responso
 
ORACIONES POR LOS DIFUNTOS.
V. No te acuerdes, Señor, de mis pecados.
R. Cuando vengas a juzgar al mundo por medio del fuego.
V. Señor, Dios mío, dirige mis pasos en tu presencia. R. Cuando vengas a juzgar al mundo por medio del fuego. V. Concédele(s), Señor, el descanso eterno, Y que le(s) alumbre la luz eterna.
R. Cuando vengas a juzgar al mundo por medio del fuego. Señor, ten piedad, Cristo, ten piedad, Señor, ten piedad.
Padre nuestro...
V. Libra, Señor, su alma (sus almas) . R. De las penas del infierno.
V. Descanse (descansen) en paz. R. Amén.
V. Señor, escucha mi oración.
R. Y llegue a ti mi clamor.
V. El Señor esté con ustedes. R. Y con tu espíritu.
Oración: Te rogamos, Señor, que absuelvas el alma de tu siervo N. (de tu sierva N.) de todo vínculo de pecado, para que viva en la gloria de la resurrección, entre tus santos y elegidos. Por Cristo nuestro Señor.
R. Amén.
V. Concédele (concédeles) Señor, el descanso eterno. R. Y brille para él (ella, ellos) la luz eterna.
V. Descanse (descansen) en paz. R. Amén.


Oraciones por los difuntos 2
V. Su alma (sus almas) y las de todos los fieles difuntos descansen en paz, por la misericordia del Señor.
R. Amén.
Otras oraciones
(Por los padres)
Oración: Oh, Dios que nos mandaste honrar al padre y a la madre, apiádate clemente de las almas de nuestros padres, y
perdónales sus pecados; y haz que los veamos en el gozo de la eterna caridad. Por nuestro Señor Jesucristo.
R. Amén.
(Por todos los fieles difuntos:)
Oración: Oh Dios, Creador y Redentor de todos los fieles,
concede a las almas de tus siervos y siervas el perdón de todos los pecados, para que consigan por nuestras piadosas suplicas la indulgencia que siempre desearon. Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.



Unción de un enfermo


S: Por esta santa unción y por su bondadosa misericordia, te ayude el Señor con la gracia del Espíritu Santo.
R: Amén.
S: Para que libre de tus pecados, te conceda la salvación y te conforte en tu enfermedad.
R: Amén.


S: Te rogamos, Señor, que por la gracia del Espíritu Santo suavices el dolor de este (a) hijo (a) tuyo (a), sanes las heridas de su alma y de su cuerpo, perdones sus pecados, ahuyentes el sufrimiento de su cuerpo y de su alma, y le devuelvas la salud espiritual y corporal. Para que al restablecerse por tu misericordia, se incorpore de nuevo a los quehaceres de su vida. Ya que has querido asociarlo (a) a tu pasión redentora, haz que confíe en la eficacia de su dolor para la salvación del  mundo. Haz que  confortado (a) con el don del Espíritu Santo permanezca en la fe y en la esperanza, y dé a todos ejemplo de
paciencia y así manifieste el consuelo de tu amor. Por Jesucristo, nuestro Señor.
R: Amén.


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(Samuel Miranda)