SANTA RAFKA AR-RAYÉS
1914 d.C.
23 de marzo
Nació en 1832 cerca
de Beirut. Sus padres le enseñaron a amar a Dios y a rezar diariamente.
A los 21 años entró en un convento de Mariamat (Hijas de María),
en el que pronunció sus votos en 1856. Estudió magisterio y
luego comenzó su misión de catequista y maestra por los pueblos
de la montaña. En 1871 fue disuelto su Instituto; entonces entró
en el monasterio de San Simeón, de la Orden Libanesa Maronita, en
el que hizo la profesión solemne al año siguiente.
En él vivió 26 años, siendo un ejemplo
vivo de obediencia, oración, abnegación y trabajo silencioso
para las monjas. En 1885 se ofreció para soportar las enfermedades
que Dios le enviara, y su salud se fue deteriorando hasta quedar ciega y
paralítica. Todo lo aceptó con la seguridad de estar participando
en la pasión del Señor. Murió el 23 de marzo de 1914
en Ad Dahr (Líbano) como altar y holocausto a la vez. Fue canonizada
el 2001 por Juan Pablo II.