SAN SILAO
1100 d.C.
21 de mayo
Nació en Irlanda y
parece que era de estirpe real. Primero fue sacerdote secular y después
fue benedictino. Probablemente fue consagrado obispo de una importante y
desconocida sede irlandesa, y por la prepotencia de un señor local
fue obligado a marchar a Roma para pedir la ayuda del papa san Gregorio VII.
Durante el viaje hizo un alto en Lucca para visitar a su hermana
Ermengarda, a la que asistió en sus últimos momentos. Prosiguió
hacia Roma pero durante el regreso enfermó, con lo que se vio obligado
a pararse en Lucca, donde murió santamente. Es el protagonista de
varias leyendas. La Orden benedictina lo celebra como santo. Su culto todavía
está vigente en Lucca, que posee sus reliquias.