VICTOR RAMON MENDOZA FLORES
 Falso sacerdote
 
 
 
 
 
 
   Comunidades católicas 
de la capital del país emitieron la señal de alarma acerca de
la presencia de individuos que usurpan las funciones de los sacerdotes que,
mediante una serie de artimañas, piden dinero y confunden a personas 
de buena fe que les solicitan la administración de sacramentos, por 
lo que exhortaron a los demás fieles y creyentes a mantenerse en alerta 
para evitar ser víctimas de fraude.
 
    La Arquidiócesis de México emitió la Circular 
No. 17/2014, donde hace del conocimiento de la comunidad el caso de un individuo 
identificado como Víctor Ramón Mendoza Flores o Ramón 
Isaí Mendoza Flores, quien es denunciado como falso sacerdote. Lamentablemente, 
esto lo pudieron comprobar algunos fieles católicos de la comunidad 
de San Bartolomé Apóstol, en la Delegación Álvaro 
Obregón, quienes alertaron de forma anónima sobre el comportamiento 
de este sujeto que se conduce de forma manipuladora y agresiva:
 
     “Mendoza Flores ha estado en la comunidad de Torres de Tepito, 
perteneciente a San Bartolomé Apóstol. Paseaba por las calles 
y entraba a las casas tratando de ofrecer sus servicios como sacerdote; luego, 
salió con la farsa de que ya había sido ordenado como obispo 
por la Iglesia Anglicana, pero dicha institución eclesiástica 
también lo desconoció. Lo anterior es solo un ejemplo de las 
múltiples disfraces que utiliza el individuo para sorprender a otros 
fieles; es que se ha presentado indistintamente como misionero, luego como 
sacerdote, después como obispo”, advirtieron.
 
    Indicaron además, que buscaron algunos datos en internet 
para saber más acerca de este falso sacerdote, y dijeron “basta ver 
su cuenta de Facebook, para darse cuenta la clase de individuo que es. Publica 
una serie de fotografías con su historial, donde se viste como franciscano, 
luego como dominico, después seminarista, obispo, y hasta como cardenal. 
Totalmente desquiciado este individuo, aparte de que hace ostentación 
de esos cargos con documentación falsificada”.
 
    Alguien más dijo tener conocimiento que la II Vicaría 
Episcopal ya había emitido un comunicado donde denunciaba a Mendoza 
Flores, por entrar con engaños a un convento donde se hizo pasar como 
obispo, y celebró unas supuestas confirmaciones y primeras comuniones. 
Se tienen datos de que el individuo organiza grupos en las inmediaciones de
San Bartolomé, donde supuestamente adoctrina a algunos niños, 
y luego los lleva a algún convento o alguna capilla abandonada y descuidada, 
donde celebra falsos rituales.
 
    Los entrevistados denunciaron que Mendoza Flores intentó 
también confundir a la comunidad de Santa Rosa Xochiac, por lo que 
la VI Vicaría Episcopal emitió un comunicado advirtiendo de 
la gravedad de la situación, y aprovecharon este espacio para aconsejar 
que se difunda lo más ampliamente el modo de actuar de este farsante 
que incurre en delitos como el fraude y la usurpación, y advirtieron 
que “puede intentar sorprender en otras partes de la capital”.
 
    También alertaron que “comienzan a proliferar otros
individuos que intentan imitar el modo fraudulento de Mendoza Flores, quien
le da por pedir dinero para ‘celebrar’ las supuestas comuniones y confirmaciones,
e intenta avalar lo anterior con documentos y membretes falsos y con firmas 
y sellos adulterados”, por lo que algunas personas que fueron bautizadas y
confirmadas por el individuo, se dijeron defraudadas por haber participado 
de ceremonias oficiadas por este sacerdote impostor.
 La Arquidiócesis Primada de México, recomienda:
 
 1.- Acudir únicamente a la Parroquia de la localidad, a solicitar 
la administración de los Sacramentos. Porque los presbíteros 
autorizados por la Arquidiócesis Primada de México, solo reciben 
solicitudes para celebrar los Sacramentos en sus respectivas Parroquias, y
no deambulan por las calles ofreciendo servicios sacramentales.
 
 2.- Solicitar al sacerdote que muestre su licencia vigente, expedida por 
la Arquidiócesis Primada de México. Únicamente en caso 
de que los solicitantes tuvieran dudas razonables sobre la identidad del presbítero.
 
 3.- A quienes hayan sido víctimas de fraude por falsos sacerdotes: 
que se preparen debidamente en la Parroquia, con personas debidamente capacitadas 
y autorizadas para ejercer la administración de los Sacramentos.